En raras ocasiones se usa cirugÃa como parte del tratamiento principal para el cáncer de pulmón microcÃtico (SCLC), ya que generalmente el cáncer se ha propagado en el momento en que se detecta.
En menos de 1 de cada 20 casos de SCLC, el cáncer se detecta como simplemente un único tumor en el pulmón, sin propagación a los ganglios linfáticos o a otros órganos. La cirugÃa puede ser una opción para estos tipos de cáncer en etapa temprana, generalmente seguida de otro tratamiento (quimioterapia o inmunoterapia).
Pruebas antes de la cirugÃa de pulmón
Si su médico cree que el cáncer de pulmón se puede tratar con cirugÃa, usted podrÃa necesitar hacerse más pruebas, como las siguientes:
- Pruebas de la función pulmonar (PFT) para saber si quedarÃa suficiente tejido pulmonar sano después de la cirugÃa.
- Un electrocardiograma (ECG o EKG, para grabar la actividad eléctrica del corazón) y un ecocardiograma (una ecografÃa del corazón) para controlar la función del corazón
- Análisis de sangre u otros estudios para asegurar que usted tenga la salud suficiente para operarse.
El médico querrá comprobar si el cáncer ya se ha propagado a los ganglios linfáticos que se encuentran entre los pulmones. Esto suele hacerse antes de una cirugÃa con mediastinoscopia o con otra técnica.
Para obtener más información sobre estas pruebas, consulte Pruebas para el cáncer de pulmón.
Tipos de cirugÃa de pulmón
Existen distintos tipos de resección pulmonar, que incluyen los siguientes:
- ±·±ð³Ü³¾´Ç²Ô±ð³¦³Ù´Ç³¾Ã²¹: En esta cirugÃa se extirpa un pulmón por completo. Puede ser necesaria si el tumor está cerca del centro del pecho.
- ³¢´Ç²ú±ð³¦³Ù´Ç³¾Ã²¹: Los pulmones se componen de 5 lóbulos (3 en el pulmón derecho y 2 en el izquierdo). En esta cirugÃa, se extrae por completo el lóbulo que contiene el tumor (o los tumores). Si se puede hacer, casi siempre este es el tipo preferido de operación para el cáncer de pulmón microcÃtico.
- SegmentectomÃa o resección en cuña: En estas operaciones, se extirpa o se extrae solo la parte del lóbulo que tiene el tumor. Este método puede utilizarse si una persona no tiene la suficiente función pulmonar sana como para tolerar la extirpación del lóbulo entero.
- Resección en manga o en manguito: Con esta operación se pueden tratar algunos tipos de cáncer de las vÃas respiratorias grandes de los pulmones. Si usted se imagina una vÃa respiratoria grande con un tumor como si fuera la manga de una camisa con una mancha de varias pulgadas por encima de la muñeca, la resección en manguito serÃa como cortar la tela de la manga (la vÃa respiratoria) por encima y por debajo de la mancha (el tumor) y luego coser el puño de la camisa en la manga que se ha acortado. Un cirujano puede realizar esta operación en lugar de hacer una neumonectomÃa para preservar más función pulmonar.
El tipo de operación que su médico recomiende depende del tamaño y de la ubicación del tumor, y de lo bien que funcionen los pulmones. A menudo, los médicos prefieren hacer una operación más extensa (por ejemplo, una lobectomÃa en lugar de una segmentectomÃa) si los pulmones de una persona están lo suficientemente sanos, ya que puede ofrecer una mejor probabilidad de curar el cáncer.
Hay dos formas principales de realizar una cirugÃa pulmonar: cirugÃa pulmonar abierta (toracotomÃa) o cirugÃa mÃnimamente invasiva. La cirugÃa mÃnimamente invasiva incluye principalmente dos tipos: CirugÃa toracoscópica asistida por video y cirugÃa toracoscópica asistida por robot (VATS y RATS respectivamente, por sus siglas en inglés). Con cualquiera de estas cirugÃas, el objetivo podrÃa ser diagnosticar (obtener más tejido para el diagnóstico), determinar la etapa (observar los ganglios linfáticos cercanos para detectar la posible propagación del cáncer) o tratar el cáncer de pulmón (extirpar todo el cáncer que se sabe que está en el pulmón). Todas requieren anestesia general, en la que el paciente permanece en un sueño profundo.
CirugÃa pulmonar abierta (toracotomÃa)
En una toracotomÃa, el cirujano realiza una incisión grande entre las costillas. El lugar del corte depende de la parte del pulmón que se deba extirpar. En general, el cirujano separa las costillas para ver el pulmón y los órganos cercanos en su interior.
CirugÃa torácica asistida por video (VATS)
La cirugÃa torácica asistida por video (VATS) requiere incisiones más pequeñas, por lo general conlleva una hospitalización más breve y menos complicaciones que una toracotomÃa. La tasa o el Ãndice de curación después de la cirugÃa parece ser lo mismo al compararlo con la cirugÃa que se hace con una incisión más grande. No obstante, es importante que el cirujano tenga experiencia realizando este procedimiento, porque requiere de mucha destreza.
CirugÃa torácica robótica o asistida por robot (RATS)
En esta técnica, la toracoscopia se realiza con un sistema robótico. El cirujano se sienta frente a un panel de control cercano a la mesa de operaciones y mueve los brazos robóticos para operar a través de varias incisiones pequeñas que se hacen en el pecho del paciente.
La RATS es similar a la VATS en el sentido de que causa menos dolor, menos pérdida de sangre y un tiempo más breve de recuperación.
Para el cirujano, el sistema robótico puede ofrecer más maniobrabilidad y más precisión cuando se mueven los instrumentos que con la VATS tÃpica. Aun asÃ, la experiencia y destreza del cirujano son los factores más importantes en el éxito de cualquiera de los dos tipos de cirugÃa toracoscópica.
Imágenes intraoperatorias
Además de los resultados de los estudios por imágenes (como las tomografÃas computarizadas o CT) realizados antes de la cirugÃa, los cirujanos también se basan en lo que pueden ver y palpar durante la operación para determinar qué partes del pulmón se deben extirpar. Sin embargo, algunos tumores pulmonares pueden no ser fáciles de ver o palpar, por lo que en algunas situaciones es posible que un tumor (o partes de él) pase desapercibido.
Su cirujano podrÃa usar un sistema especial de imágenes intraoperatorias durante la cirugÃa, útil para detectar tumores que no son fáciles de ver o palpar. Para este método, se inyecta en la sangre un medicamento fluorescente llamado pafolacianina (Cytalux) en el plazo de las 24 horas previas a la cirugÃa. El medicamento pasa por el cuerpo y se fija a una proteÃna especÃfica que se encuentra en las células del cáncer de pulmón. Una vez en el quirófano, el sistema de imágenes emite una luz infrarroja cercana que hace que el medicamento se ilumine, lo que puede ayudar al cirujano a identificar qué zonas del pulmón se deben extirpar.
Los efectos secundarios más comunes después de recibir la pafolacianina son dolor abdominal, acidez, picazón o comezón, dolor en el pecho, náuseas, vómitos y sofocos. Es probable que el médico le pida que evite cualquier suplemento que contenga ácido fólico durante unos dÃas antes del procedimiento, ya que podrÃa afectar la eficacia de este medicamento.
Posibles riesgos y efectos secundarios de la cirugÃa del pulmón
La cirugÃa para el cáncer de pulmón es una operación importante que puede tener efectos secundarios graves, razón por la que la cirugÃa no es una buena opción para todos. Aunque todas las cirugÃas conllevan algunos riesgos, estos dependen de la extensión de la cirugÃa y del estado de salud general de la persona.
Entre las posibles complicaciones durante la cirugÃa y al poco tiempo de hacerla se incluyen reacciones a la anestesia, exceso de sangrado, coágulos sanguÃneos en las piernas o en los pulmones, infecciones de la herida y neumonÃa. Aunque es raro, es posible que en algunos casos las personas no sobrevivan a la cirugÃa.
La recuperación de la cirugÃa de cáncer de pulmón por lo general dura de semanas a meses. Cuando la cirugÃa se hace a través de una toracotomÃa, el cirujano tiene que separar las costillas para llegar al pulmón, y por lo tanto la zona cercana a la incisión puede doler durante un tiempo después de la cirugÃa. Es posible que sus actividades estén limitadas durante al menos uno o dos meses.
Si los pulmones están en buenas condiciones (excepto por la presencia del cáncer), lo normal es que pueda reanudar sus actividades habituales después de un tiempo si se le extirpó un lóbulo o incluso todo el pulmón. Si usted también tiene otra enfermedad de pulmón, tal como enfisema o bronquitis crónica (comunes entre las personas que fumaron por mucho tiempo), podrÃa tener dificultad para respirar después de la cirugÃa.
Después de la cirugÃa
Cuando se despierte de la cirugÃa, tendrá un tubo (o tubos) saliendo del pecho que se adhiere a un recipiente especial para permitir el drenaje del exceso de lÃquido y aire. Le quitarán el tubo (o los tubos) una vez que el drenaje de lÃquido y la fuga de aire disminuyan lo suficiente. Por lo general, deberá pasar entre 1 y 7 dÃas en el hospital, según el tipo de cirugÃa.